Elegir el tipo de enchufe adecuado es sencillo si conoces los diferentes tipos que existen en el mercado. En esta ocasión vamos hablaros de los enchufes estancos, utilizados en instalaciones al aire libre.
Los enchufes estancos son enchufes con materiales especiales que se utilizan en instalaciones de electricidad exterior que requieren una precaución mayor. Las condiciones ambientales pueden estropear estos enchufes, por lo que deben de cumplir una protección especial de antihumedad y una estanqueidad que impida la entrada de agentes externos en el dispositivo instalado.
Los enchufes estancos tienen varios niveles de protección:
- Protección IP-40: impide el acceso de cuerpos superiores a un milímetro.
- Protección IP-44: impide el acceso de cuerpos superiores a un milímetro y proyecciones de agua.
- Protección IP-54: evita la entrada de polvo y previene contra proyecciones de agua
- Protección IP-55: protege la entrada de polvo y contra chorros de agua.
Este tipo de enchufes son muy útiles en zonas húmedas o con agua; como piscinas, jardines, accesos a la vivienda, terrazas, etc. También pueden emplearse en otras estancias de una vivienda como puede ser un baño, una cocina, un vestuario o en una zona de aparcamientos.
Los enchufes estancos tienen que cumplir tres características: estar protegidos contra la entrada de grasa, agua y polvo.
En el mercado encontramos gran variedad de enchufes estanco con diferentes acabados y formas. Todos ellos deben llevar una etiqueta en la que se indique el nivel de protección del mismo. De esta manera nos aseguramos de que estos enchufes están homologados.
Si quieres realizar una instalación eléctrica en exteriores, ya sabes qué tipo de enchufe debes utilizar: enchufes estancos.