Imagen de cables normalizados

¿Conoces los diferentes tipos de cables normalizados que puedes encontrar en función de su resistencia al fuego? ¿Sabrías identificarlos? Es muy sencillo. En este post vamos a explicarte cuáles son los tipos de cables normalizados que puedes encontrar según su resistencia al fuego así como sus principales características. Existen tres tipos de en función de su resistencia al fuego y teniendo en cuenta su designación normalizada. Cables de PVC Cables LH Cables LH con MICA Los Cables de PVC son cables normalizados revestidos con policloruro de vinilo. Estos cables normalizados se utilizan en instalaciones que no requieren seguridad contra incendios ya que en caso de combustión emiten cloruro de hidrógeno y por su composición hace que la llama no se propague. Se pueden usar en instalaciones domésticas e industriales. Los Cables LH son cables normalizados libres de halógenos. Estos cables normalizados no propagan el incendio, no producen humos opacos ni gases tóxicos o corrosivos. Se suelen usar en instalaciones de uso público, en instalaciones domésticas e industria. Los Cables LH con MICA son cables normalizados libres de halógenos y resistentes al fuego. Estos cables normalizados mantienen la continuidad de la señal hasta 90 minutos. Se utilizan en instalaciones contra incendios, tanto en detección, como lucha contra incendios y sistemas de seguridad. Con todo esto, ya puedas hacerte una idea de los diferentes tipos de cables normalizados que puedes encontrar en el mercado según su resistencia al fuego. Utilízalos sin miedo.

Imagen de un tubo corrugado libre de halógenos

El tubo corrugado  es un excelente instrumento para realizar instalaciones eléctricas. Este material protege toda la instalación de posibles daños y además facilita enormemente la construcción. Primero se suele hacer la pared, y luego las rozas para meter el tubo. Este tubo corrugado también suele ir por el techo y los suelos dependiendo del tipo de instalaciones que sean. Algunos de estos tubos corrugados van lubricados en su interior, lo cual facilita enormemente el deslizamiento de los cables que se introducen posteriormente. De esta manera, con una guía es muy sencillo cambiar una instalación existente, o introducir nuevos cables. Para ello podemos utilizar tubo corrugado normal, o tubo corrugado reforzado que tienen una estructura más fuerte con lo cual se provee a la instalación eléctrica de una mayor protección. Otro aspecto a tener en cuenta es que estén libres de halógenos o no. La normativa no obliga a ello, pero teniendo en cuenta que la variación del precio no es sustancial, no tiene sentido que los cables hayan de ser libres de halógenos y el tubo corrugado no. Y más si tenemos que el incendio se suele provocar más veces fuera de la instalación que dentro, por lo que lo primero en quemarse sería el tubo. Además de las características anteriores, el tubo corrugado nos ofrece diferentes tipos de protección, como la resistencia a la corrosión, cierta resistencia al fuego, a la temperatura y a la entrada de agua. Sin duda, hoy en día no es concebible una instalación que no tenga tubos corrugados ya que está expresamente prohibido por el REBT (Reglamento electrotécnico de baja tensión) por lo peligroso de la misma, así que si tenéis pensado poneros manos a la obra, no os olvidéis de los ponerlos.

cuadros eléctricos de nueva generación

Conoces lo que son los cuadros eléctricos, pero… ¿sabrías identificarlo por dentro? Si hacemos un breve repaso a la utilidad de los cuadros eléctricos diríamos que se utilizar para eliminar o para disminuir los daños en una instalación eléctrica en caso de que en el sistema se produjese una sobrecarga o sobretensión, o un cortocircuito. Así a primera vista puede parecer una nimiedad, pero los cuadros eléctricos evitarán que no solo la instalación, sino también todos los aparatos eléctricos conectados a la misma sufran daños y se estropeen. Podemos dividir los cuadros eléctricos para una vivienda en dos tipos. Los cuadros eléctricos tradicionales, y los cuadros eléctricos nuevos. Ahora, vamos a pasar a explicar las diferencias entre unos y otros. Los cuadros eléctricos tradicionales: Cuentan con tres partes claramente diferenciadas. Éstas son: ICP, que es la abreviatura del interruptor de control de potencia. Se utiliza para que evite daños cuando se ad una sobrecarga, y controla que la potencia que se utiliza en el sistema no sea superior a la contratada porque podría no ajustarse a las características de la instalación y por lo tanto, dañarla. ID, que significa interruptor diferencial. Los cuadros eléctricos tienen este control para que el flujo de corriente se anule inmediatamente en caso de que haya una fuga a tierra, como suele ser el caso cuando una persona interactúa con un elemento en mal estado. Evitará que la persona reciba una descarga. PIAs, o pequeños interruptores automáticos. Son pequeños protectores para las diferentes instalaciones que protege el cuadro eléctrico. Por ejemplo, pueden ser los enchufes, los elementos eléctricos de la cocina, etc… Los cuadros eléctricos nuevos: Son básicamente iguales, pero cuentan con un par de elementos más que añaden protección al sistema. Estos elementos son: IGA, que viene siendo el interruptor general automático. Este nuevo elemento impide que la corriente que circula por el sistema sea siempre menor a la admitida. Es decir, puede que hayamos contratado una potencia, pero el sistema admita más. Este elemento, al contrario que el ICP, se ocupa de que el sistema nunca sobrepase la máxima que físicamente admite. PCS o protector contra sobretensiones. Este elemento intentará evitar que ningún aparato que esté conectado a través de los sistemas que pasan por el cuadro eléctrico se vean dañados en caso de sobretensiones.

La importancia de los mecanismos eléctricos

La importancia de los mecanismos eléctricos queda patente a la hora de interactuar con los diferentes elementos de la vivienda (o cualquier otro lugar con mecanismos eléctricos) que están alimentados con corriente eléctrica. Podemos afirmar que los primeros mecanismos eléctricos se inventaron a la par que se descubrió la aplicación de la electricidad (podríamos dar ese mérito a Samuel Morse, con su telégrafo eléctrico en 1833), aunque existen datos que documentan las primeras interacciones de las personas con la electricidad hacia el año 600 antes de Cristo (Tales de Mileto). Por aquella época, los mecanismos eléctricos eran realmente sencillos pero funcionales, aunque se limitaban a realizar tareas muy sencillas. Actualmente es una industria que ha evolucionado muchísimo, e incluso aquellos mecanismos eléctricos que pretenden simular los de tiempos pasados, cuentan con un diseño mucho más moderno. El problema es que según un estudio realizado por la Fundación Mapfre y el Departamento de Construcción y Tecnología Arquitectónicas de la ETS de Arquitectura de la Universidad Politécnica de Madrid, aseguran que aproximadamente el 33% de las viviendas españolas cuentan con instalaciones y mecanismos eléctricos con antigüedades superiores a los 24 años, y un 10%, con una antigüedad superior a los 35 años. No queremos decir con ello que no sean mecanismos eléctricos que todavía no ofrezcan un servicio adecuado para el consumo de la época, pero siendo realistas, éste se ha incrementado considerablemente con el paso de los años con la incorporación a la vivienda de elementos como las vitrocerámicas, secadoras, cargadores varios, etc… También es verdad que cada vez se cargan más la misma toma de corriente con ladrones, alargaderas y otro tipo de soluciones, dando pie a posibles sobrecargas con el riesgo que conlleva. Sabemos que es más fácil decirlo que hacerlo, pero mantener una instalación eléctrica adecuada al consumo, y unos mecanismos eléctricos adaptados a la corriente que controlan es realmente importante para la seguridad de la vivienda y de sus ocupantes. Si tienes oportunidad, no lo dejes de lado, los mecanismos eléctricos no son solamente una cuestión estética.

Felicidades a Niessen por sus 100 años

Niessen cumple 100 años y queremos celebrarlo. Durante todo este tiempo ha estado proveyendo al mercado de soluciones eléctricas como podemos ver en la imagen superior. La evolución ha sido asombrosa, y ahora podemos disfrutar de productos de última tecnología gracias a su esfuerzo diario. Como ellos dicen, ya llevan 100 años iluminando las casa de todos aquellos que han confiado en sus soluciones, 100 años dando trabajo a la gente que ha querido colaborar con ellos para hacer de la empresa lo que es hoy en día, diversificando su negocio, ya que ha día de hoy su catálogo va mucho más allá que los enchufes y los interruptores, y emprendiendo nuevos proyectos . Y es que Niessen forma parte de una empresa multinacional que se llama ABB. El alcance de ésta, es increíble puesto que como uno de los líderes de electrotecnia y automatización a nivel mundial, los proyectos que abarca van mucho más allá de los mecanismos eléctricos. Trabaja también en los sectores solar, eólico e hídrico. Cuentan con tres centros de excelencia en España, localizados en Zaragoza, Córdoba y Bilbao, que junto con otros centros pertenecientes a otras entidades, apuestan por potenciar conjuntamente una cultura de calidad e innovación. Pero volviéndonos a centrar en lo que a nosotros más nos interesa, Hemos encontrado un par de vídeos que probablemente os resulten bastante interesantes. El primero es el programa de RTVE llamado «Made in Spain», que trata sobre la fabricación de los interruptores de baja tensión de Niessen. Aquí podrás ver el programa completo:     Y aquí está el extracto del programa que trata solamente de los interruptores Niessen, por si no quieres ver todo el programa: Esperamos que os guste tanto como nos ha gustado a nosotros. ¡Felicidades, Niessen!

Esto es un protector de sobretensión

¿Qué son los protectores eléctricos o de sobretensión? Son unos dispositivos, que también se nombran en ocasiones como protectores eléctricos, que sirven básicamente, para evitar que los picos o una excesiva subida de tensión dañen nuestros equipos, como ordenadores, televisión, lavadora, etc… Básicamente, cualquier cosa que esté conectada a la red. Los protectores eléctricos se dividen en dos tipos: Protectores eléctricos contra picos y subidas de corriente no permanentes: Estos equipos tienen que tener una velocidad de corte muy alta, normalmente de nanosegundos, para evitar dichas fluctuaciones. Los daños que se pueden producir por este tipo de sobrecorriente son desde una mera interrupción a una destrucción total del equipo afectado. Protectores eléctricos contra subidas de tensión permanentes en el tiempo: El sistema de trabajo de estos protectores es totalmente distinto que el de los anteriores. Mientras que en los no permanentes se puede solventar a través de una derivación a tierra de la corriente que excede el funcionamiento habitual, los permanentes han de interrumpir el servicio por completo, puesto que no pueden estar realizando una derivación indeterminadamente. Los daños también pueden llegar a causar la destrucción de los equipos, pero en ocasiones no nos damos cuenta de que estamos sufriendo una subida de tensión de este tipo si no tenemos los protectores eléctricos, y los dispositivos sufren un mayor calentamiento y con ello, una reducción drástica en el tiempo de funcionamiento de los mismos. Cuando se escojan los protectores eléctricos, un factor a tener muy en cuenta es el valor máximo que el equipo que trabaja puede soportar. El protector siempre habrá de ser inferior a éste porque si no, cuando realice el corte, el equipo ya estará dañado. También hay que tener en cuenta el tiempo de respuesta de los protectores eléctricos, ya que siempre tienen un retardo. Si éste es muy grande, el equipo estará sometido más tiempo a esa corriente dañina, por lo que es más fácil que derive en daños.

Cuadros eléctricos para empotrar

Para aquellos que no sepan muy bien qué son los cuadros eléctricos, vamos a tratar de hacer un repaso acerca de este producto: Un cuadro eléctrico es un panel donde se instalan una serie de dispositivos para proteger y controlar toda la instalación eléctrica que depende de él. Suele incorporar interruptores y cortacircuitos, o por ejemplo contadores, entre otras cosas. En las instalaciones industriales, es posible encontrar un cuadro principal, y otros secundarios, mientras que en las viviendas, cada una tiene un solo cuadro en su interior. Éstos deben de estar colocados normalmente, lo más cerca posible de la entrada de la instalación eléctrica a la casa, y según la normativa vigente, han de estar aproximadamente, como mínimo, a 1,5 metros del suelo. Cuentan a su vez con un interruptor general, y luego con más interruptores para circuitos más concretos, de manera que podemos realizar cortes en el suministro según nos interese. Si vamos a manipular un cuadro eléctrico, siempre hay que cortar la corriente previamente para no tener posibles accidentes durante su manipulación. Por regla general, debería ser fácil identificar los diferentes cables que encontremos en el cuadro: Toma de tierra: Cable amarillo-verde. Neutro: Azul claro. Fase: Marrón, negro o gris. Las secciones de cada cable, variarán en función del circuito que vayan a alimentar y el consumo que vayan a tener que soportar, por lo que no suele servir el mismo cable para todas las instalaciones. En una vivienda puede oscilar entre 1,5 y 6mm2 generalmente. La diferencia entre los automatismos que encontramos en el cuadro es la siguiente: Diferencial: Protege el conjunto de instalaciones. Interruptores: Protegen un circuito en concreto contra las subidas de tensión y contra los cortocircuitos del mismo. Nuestra recomendación es que si no es un especialista en electricidad, consiga la asistencia de un electricista para realizar trabajos en el cuadro, ya que es un elemento muy delicado de trabajar, ya que una mala manipulación del cuadro eléctrico puede poner en riesgo toda la vivienda.

Manguera de cable eléctrico libre de halógenos

A la hora de realizar una instalación eléctrica, uno de los puntos más importantes a tener en cuenta en el diseño de la misma y en su presupuesto, es la normativa vigente que se ha de cumplir según sus características. En esta ocasión vamos a hablar de una en concreto, que afecta a los cables eléctricos que vayamos a utilizar para realizarla. Hablamos de la UNE 21-147/1, y los cables eléctricos libres de halógenos. Ésta nos indica que los cables eléctricos que usemos han de ser libres de halógenos. El texto recogido es el siguiente: “Ensayos de los gases desprendidos durante la combustión de cables eléctricos. Determinación de la cantidad de gas ácido halógeno desprendido durante la combustión de materiales polimerizados, obtenidos de cables eléctricos”. El resultado que se plasma en la normativa después de este ensayo, es que los cables eléctricos utilizados en dichas instalaciones han de resultar totalmente libres de halógenos. Cuando realizamos una instalación en un lugar de pública concurrencia, esta norma debe de ser observada sin excepción alguna puesto que en caso contrario, con una instalación de cables eléctricos normales y corrientes, estaríamos incumpliendo la legislación con las consecuentes responsabilidades. El sentido de la utilización de estos cables eléctricos es que en caso de incendio, se propaguen menos humos, y menos tóxicos. Los instaladores, como expertos y profesionales de la materia, han de estar al tanto de las diferentes normativas que afectan a la que es probablemente la materia prima más utilizada en el gremio; el cable eléctrico. La responsabilidad que se adquiere en materia de seguridad a la hora de escoger los correctos materiales es muy importante. La diferencia de dinero entre un cable eléctrico libre de halógenos y un cable eléctrico normal, no ha de ser excusa para incumplir reglas en normativas de seguridad.

Interruptores Niessen Tacto

Días atrás hablamos sobre los mecanismos de la marca Niessen, pero de la gama Zenit y la Olas. Hoy vamos a tratar otra de sus gamas, por lo que hablaremos de los interruptores Niessen Tacto. La particularidad más visible de éstos, es que combinan una forma cuadrada para hacer la base del mecanismo y un activador ovalado. Con ello, los interruptores Niessen Tacto consiguen ofrecer una mayor superficie de contacto, a la vez que se ha trabajado en la suavidad del mecanismo para que como resultado final se experimente una experiencia única cuando se accionan. No por ello dejan de ser interruptores tan robustos y compactos como los de otras series. El diseño que nos ofrece la serie Niessen Tacto, también asegura un menor balanceo, garantizándonos una excelente sujeción de la tecla. Y por supuesto, como ya saben, la experiencia va más allá del propio mecanismo por lo que han vuelto a hacer hincapié en la textura del interruptor ofreciendo una serie de acabados en diferentes materiales que se ajustarán perfectamente a nuestras necesidades. En la serie Niessen Tacto, podemos destacar los acabados básicos, que ofrecen una terminación en blanco, gris piedra, antracita, plata y cava, los acabados en cristal, con 4 acabados diferentes (azul, aluminio, glassé y blanco) y por último, el acabado en materiales nobles, como la madera de arce, la madera de wengé, el acero, la pizarra o el mármol travertino. Además de estos mecanismos básicos que hemos descrito de la Niessen Tacto, también nos ofrecen una amplia gama de productos que cubrirá todas las necesidades que puedan surgir, como sistemas de señalización, sistemas de sonido ambiental, temporizadores, reguladores de intensidad, y un largo etcétera que no dejará de cubrir ninguna de nuestras expectativas. Niessen nos ha vuelto a sorprender con la serie Niessen Tacto para dispositivos de control.

caja de herramientas

Si eres un electricista, o tienes que hacer unas reparaciones o sustituciones eléctricas en casa, tu caja de herramientas debe de estar preparada para todas las eventualidades. Es un aspecto realmente importante que normalmente se descuida y una caja de herramientas  incompleta acarrea multitud de problemas e inconvenientes. Un trabajo sencillo puede llegar a ser toda una odisea si no se tienen los materiales adecuados para cada operación. Por eso, vamos a hacer un repaso de los objetos más básicos que no debe faltar en una caja de herramientas: Taladro: Imprescindible si has de hacer algún agujero en la pared para insertar tacos, como por ejemplo el caso de la colocación de una lámpara. Brocas: Dependiendo el material a perforar, deberemos escoger aquellas que sean más adecuadas para la instalación. Una mala elección de la broca puede hacer que no podamos tan siquiera comenzar el trabajo. Existen distintos tipos por lo que en tu caja de herramientas deberás llevar siempre al menos tres brocas de distinto número. Tijeras de electricista o pelacables: Cualquier trabajo de electricidad tiene cables por medio. Siempre hay que tener a mano una forma segura y eficiente de poder dejar al aire la sección del cable que nos interese. Martillo: Siempre dicen que es una herramienta que se ha de usar lo menos posible, pero… ¿a cuántos no nos ha sacado más de una vez de un apuro? Siempre conviene tener uno a mano, por lo que incluyelo siempre en tu caja de herramientas. Cinta de medir: Si has de realizar un corte en los cables, tendrás que saber a qué distancia hacerlo Destornilladores: Siempre son necesarios. Bien sea para ajustar empalmes en las fichas, bien sea para asegurar los mecanismos de los enchufes y conmutadores… Básicos en tu caja de herramientas. Dispositivos de medición: Al menos para saber si llega tensión al punto en el que estás trabajando. Tanto por seguridad, como para detectar problemas en el circuito Alicates: Para cortar cables, para estirar de ellos si es necesario para pasar más fácilmente la instalación, para sujetar alguna pieza. Te pueden sacar de más apuros de los que crees. Nivel: A la hora de colocar los mecanismos de los conmutadores, los enchufes y demás, es conveniente tener un nivel a mano para poder dejarlos totalmente nivelados. De cerca puede que no se aprecie la inclinación, pero de más lejos se podrá ver mejor y el conjunto perderá enteros. Pinza de punta: En ocasiones no hay hueco suficiente para manejarse con un alicate, o tal vez necesites mucha más precisión en el agarre. Estas pinzas, te sacarán del atolladero en esos casos, por lo que no dejes de meterlas en tu caja de herramientas. Estos son solo algunos de todos los materiales que puedes necesitar y que no deben faltar en tu caja de herramientas. Quizás los más básicos, pero has de tener en cuenta las particularidades del trabajo que vas a realizar puesto que cada uno tiene unos requerimientos distintos.